Completa sinceridad

Conocimientos completamente equívocados. Quien cree saberlo todo, resulta no sabiendo nada sobre un tema que parece no importarle, pero cuando aparece, no sabe cómo reaccionar. ¿ Qué decir ? ¿ Sí ? ¿ Me arriesgo a lo que me propone aunque no tenga coherencia pero me promete felicidad infinita ?, ¿ No ?, ¿ Me detengo a analizar que lo que estoy haciendo realmente puede llegar a ser una pérdida de tiempo que puede terminar con un corazón roto ? ¡ Y qué importa realmente ! Si no lo hago, me reprocho no haberlo hecho, si lo hago, me reprocho no haberlo pensado mejor antes, ¿ Cuál es una posición intermedia ? ¿ Cómo se pueden analizar ese tipo de cuestiones que racionalmente no son analitícas ? Analizar lo que puede dar vueltas una y otra vez no sirve realmente, pues mientras te detenes a cuestionar y pensar, la vida sigue pasando, el tiempo sigue corriendo y a lo último lo que te cuestionas es ¿ Por qué se pasó tan rápido todo ? Y . . . capaz porque te quedaste esperando, cuestionando, en vez de vivir el momento, y si viviste el momento y se pasó rápido, es porque estabas en lo cierto, valía la pena arriesgarse, te diste cuenta que lo pasaste bien y que no querías que terminara. Pero terminó por alguna razón que va a ser útil en el futuro. Pensamiento conformista. Ya lo sé. Pero de vez en cuando me tengo que conformar con algo.